En una casita a las afueras
del pequeño pueblo de
Sycamore viven los
Stroup, típica familia de
blancos pobres compuesta por
una madre
severa y trabajadora, un
padre gandul y enredador y
el hijo de ambos,
William, sin olvidar a
Handsome Brown, el muchacho
negro que ejerce
de criado para todo.
Mientras Martha Stroup se
mata a trabajar lavando
la ropa de sus vecinos,
Morris Stroup ideará todo
tipo de absurdas
invenciones para vivir sin
dar golpe, provocando
multitud de situaciones
cómicas en las que los
principales perjudicados
resultarán ser su propia
esposa y el pobre Handsome
Brown.
Aunque revestidas de humor y
ligereza, las catorce
historias que componen
esta fragmentaria novela
iniciática, narradas con
deliciosa sencillez e
inocencia por el pequeño
William, dejan entrever el
fondo de amarga
denuncia del racismo y la
ignorancia del sur profundo,
al igual que ocurre
en otras grandes obras de
Erskine Caldwell, como "El
camino del tabaco",
"La parcela de Dios"
o "Tumulto
en julio", publicadas en
esta
misma colección.
No en vano Caldwell ha sido
señalado como uno de los
grandes escritores
sociales norteamericanos del
siglo XX y comparado con
Faulkner y Steinbeck