Esta es la historia de un niño, Sergio, pero es también la historia de muchos niños a quienes vemos tristes porque se imaginan, o les han hecho imaginar, que su apariencia no es la mejor. Sin embargo, ¿qué puede afectar a los demás que uno lleve el pelo corto o largo, que vista
de tal o cual manera, que sea rubio o moreno, que tenga una u otra edad? Lo verdaderamente importante es fomentar nuestras virtudes, alimentarlas con nuestros sueños y crecer, sobre todo, dentro de nuestro corazón.