Se habla constantemente de las nuevas tecnologías y de la radical transformación que su aplicación está suponiendo en las distintas actividades humanas, tanto desde el punto de vista del contenido como de la metodología de trabajo, y resulta muy necesario realizar un análisis profundo sobre su relación con el mundo de la exposición.
Tres campos específicos son especialmente sensibles a dichos medios: por un lado, su faceta como técnica, que debería, bien aplicada, facilitar y, por tanto, mejorar, el diálogo entre la obra y el espectador (aspecto tratado en la parte «Nuevas tecnologías en los museos, de la contemplación a la experiencia»); en segundo lugar, el hecho de que se los considere como obra creativa en sí mismos, susceptible, pues, de ser «expuesta» al público («Museografía de las colecciones de intangibles»), y, finalmente, las transformaciones que su manejo está provocando tanto en el diseño y comprobación del proyecto expositivo, como en el cambio radical de la enseñanza del montaje de exposiciones («Los medios audiovisuales en la enseñanza de las técnicas expositivas y en la redacción/comprobación del proyecto»), un ámbito que implica personalmente a los autores de esta obra.
Para llevar a buen puerto las dos primeras partes de este programa, se ha contado con la colaboración de los equipos profesionales más eficaces en cada caso: VideaLab (Grupo de Visualización Avanzada) de la Universidad de La Coruña, coordinado y dirigido por Luis Hernández, y el Grupo Interfaces Culturales, Arte y Nuevos Medios, de la Universidad de Castilla-La Mancha, adscrito al Mide (Museo Internacional de Electrografía de Cuenca), coordinado y dirigido por José Ramón Alcalá Mellado.